martes, 22 de mayo de 2007

Por escribir que no quede

Cada vez se dan mayores y más lamentables manifestaciones de que cualquier excusa es válida para eludir la obligación. Véase la siguiente: son las tres de la tarde de una soporífera sobremesa post-chino (ojo, hablamos de restaurantes). Marmote constata que cuenta con dos gloriosas horas para dedicar a los ejercicios de economía. Inmediatamente, las economías abiertas pierden todo su atractivo ante la necesidad imperiosa de actualizar el blog con los puntos álgidos del día. Se da, sin embargo, la triste circunstancia de que los puntos álgidos del día son los siguientes:
-He escapado por un pelo de la muerte bajo las ruedas de un Mercedes en el cruce de Juan Bravo con Núñez de Balboa (algunos hasta el fallecer lo haríamos con glamour)
-Viva! Aceptan tarjetas de crédito en el Eurodroguer! (hay momentos en los que el glamour hay que obviarlo, y esto a lo grande)

Imposible no constatar que cada día ando más lejos de aquéllo que llaman "hacer de la propia vida una obra de arte".

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Teniendo en cuenta que la entrada de hoy fue cortita, tampoco has conseguido eludir mucho la obligación. Lo que deberías hacer es soltar todo e ir conmigo a p.ej. Burgos (o a Toulouse, que sabemos que es el equivalente francés).

MARMOTE dijo...

Como hoy no hagas acto de presencia en Alonso Martínez a las 9.00 p.m. y me vengas con la lamentable excusa de que has líado el petate y te has ido a Burgos, me enfado (y te condeno una semana a sólo oir sueco, y te colapso el tablet con toda la discografía e imaginería de Abba. Castigao, vamos).
Lo de que la entrada de hoy fue cortita...pues no te lo vas a creer...pero me dieron mala conciencia...

Anónimo dijo...

Y más que deberían darte! Os veo muy ociosos...

MARMOTE dijo...

Pues te engañas (y lo sabes).
Además, se acabo esto de la mala conciencia, ayer tuve un momento de debilidad...¿qué pasa? (¿Acaso no tuviste tú otro, que nos seguiste dócilmente hasta el chino y estuviste allí sentado, tan modoso?)

Anónimo dijo...

Por puntos (que sabes que me encanta):
1. En mis tiempos hacíamos el mismo trabajo que vosotros pero calculábamos los modelos a mano, que no teníamos ordenadores y teníamos que venir a clase descalzos porque la beca no nos llegaba para comprar zapatos.

2. Servidor dedica su tiempo de ocio a pensar cómo dar mala conciencia a sus compañeros y el de trabajo a poner en práctica esas estrategias. Ya aparecerá otro momento de debilidad, ya.

3. Lo del chino. No me tires de la lengua.

MARMOTE dijo...

Esto de los puntos es un vicio, y contagioso:

1)Veo que eres un nostálgico...ahora entiendo, más que nunca, tu amor a las matemáticas y sobre todo tu desapego a todo lo que se llame calzado, sobre todo si no te permite enseñar, cuanto menos, las uñas.

2) Muy bonito y muy bien aprovechado el tiempo!

3) Sí, lo del chino. Ya sé que me la tienes guardada y que el día menos pensado me arrastrarás al Sabeco. De sobra lo sé.